lunes, 3 de enero de 2011

A uno de mis profesores

Hora tras hora, durante años y años,… echando la vista atrás observo como una gran parte de mi vida ha transcurrido en clase, estudiando, formándome para un futuro incierto.
Miro hacia el pasado y recuerdo aquéllas clases aburridas, en las que había que memorizar un montón de cosas, o simplemente subrayar la parte del libro que iba leyendo el profesor o que indicaba que era más importante, hasta que desconectaba y pintarrajeaba los márgenes del manual mientras mi mente se transportaba a cualquier otro lugar más interesante.
Pero no siempre era así.
Recuerdo las clases con el profesor “Chincheta” (por lo grande de su cabeza) en sexto de EGB, el cual, aunque era algo serio y estricto se esforzaba por enseñarnos un montón de cosas de ciencias naturales en clase, haciendo despertar nuestra curiosidad.  En aquellas clases sentíamos la necesidad de esforzarnos, de que merecía la pena concentrarse y aprender, puesto que nos lo enfocaba de un modo que fomentaba nuestras ganas por conocer más, por ir más allá de lo que marcase el programa de sexto curso en esa época. Todavía recuerdo como aprendí las funciones del aparato digestivo, respiratorio,… y esos conocimientos primeros no se me han borrado nunca, aunque después lo estudiase todo con mayor profundidad, pero siempre, lo que ha ido quedando son esos conocimientos bien aprendidos, porque los adquirí con interés, con ganas realmente de saber lo que ocurría. No sé como  Juan Manuel, que ese es el nombre del profesor “Chincheta” consiguió interesarnos a todos en sus clases, y aunque era duro y costaba ganarse una buena nota, suponía un reto personal el ser capaz de aprender cómo funcionaba nuestro cuerpo, o la electricidad, o todas aquellas cosas que nos rodean y que nunca saben explicarte por qué ocurren. Tenías la sensación de aprender cosas útiles, tal vez porque lo transmitía de un modo que supiésemos captar la idea, inicialmente lo explicaba con un lenguaje sencillo, aunque fuese introduciendo conceptos nuevos que asimilábamos fácilmente. También fue el primer año que nos llevaron al laboratorio de ciencias, era como sentirse “mayor” porque realizabas experimentos curiosos, y luego lo contaba con ilusión en casa mostrando a mis padres todo lo que ya sabía del mundo.
Hace ya unos veinte años de aquello y hace algunos años, en una mudanza apareció el cuaderno verde de Ciencias Naturales de 6º de EGB, nunca lo tiré y todavía continúa en el trastero, con los dibujos del cuerpo humano realizados por mí misma, todo ordenado, con los conceptos y las ideas claras que el profesor nos iba explicando. No recuerdo ningún libro de texto, no sé si nos recomendaría alguno o no, el caso es que nos explicaba todo, sin seguir ningún manual, nos ponía transparencias, nos daba fotocopias con algunos dibujos (recuerdo uno muy detallado del ojo humano, con todas sus partes y como nos explicaba las funciones de los conos y los bastoncillos en el interior del ojo, o por qué después de mirar al sol seguíamos viendo unas luces aunque cerrásemos los ojos), hacer una maqueta sobre como giran los planetas, o una especie de juego de “electro” que hacía que se encendiese la bombilla si conectabas las dos respuestas correctas,… No sé si es que me cautivó la asignatura o la forma de explicarla, pero en aquellas clases no me distraía, concentraba mis cinco sentidos en atender a las explicaciones y seguirlas en detalle y recuerdo estudiar mucho para los exámenes, pero no como una obligación sino con ganas, como he indicado antes como un reto por demostrarle al profesor y con ello a mi misma que era capaz de aprender cosas que con esa edad me podrían parecer tan complejas, tan de “mayores”. Creo que realmente Juan Manuel creía en lo que enseñaba, y por eso lo transmitía con tanta fuerza. Pero han pasado muchos años desde entonces, y no me atrevo a dirigirle esta carta directamente a él, por eso, en forma de redacción, le recuerdo, yo era solo una niña y él muy serio y estricto, y ni entonces ni nunca llegué a tener confianza con él como para llegar a decirle todo lo que aprendí en sus clases. Solo lo tuve durante ese curso, luego cambié de profesores en séptimo y octavo, pero los conocimientos que adquirí todavía siguen en mi.
María

ÁNALISIS DE LA PELÍCULA: "A LOS TRECE"


Dirección Catherine Hardwicke
Intérpretes: Holly Hunter, Nikki Reed y Evan Rachel Wood.
Origen USA (2003) - Género Drama - Clasificación +13 - Duracion 100'
Sipnosis: Tracy, una joven de 13 años que todavía tiene cierta mente infantil, se va a fija ene l penúltimo año de escuela en una de las chicas más populares, por la que empieza a sentir cierta admiración y de la que intenta hacerse amiga, Evie. Bajo la influencia de ella, la chica más popular del instituto, empezará a verse atrapada en un acelerado ritmo de vida que nada tenía que ver con su anterior sedentarismo. Mientras tanto Mel, su madre, trata desesperadamente de comprender que le ocurre a su hija, con la que anteriormente tenía una relación de confianza muy estrecha. En esta película se presenta una visión sensible y reveladora de la juventud urbana; un retrato de lo que piensan, hacen, sienten y sufren los adolescentes de la actualidad.


ANÁLISIS DE LA PELÍCULA:
En esta película se muestra los cambios de la niñez a la adolescencia, donde Tracy se encuentra en ese momento en el que trata de buscar su identidad y para ello va a tomar como referente a Evie. Observa en el instituto que ella es una chica popular, por la que muestra admiración la mayoría de los compañeros, incluso su propio hermano (al principio) y la toma como referente para querer pertenecer a su grupo, en esa búsqueda por su propia identidad. En la lectura “La adolescencia y sus contextos: familia, escuela e iguales”, Madrid, Pearson Educación, se hacer referencia a que uno de los cambios sociales más destacados en la adolescencia es la importancia que adquiere la relación con el grupo de iguales. En este caso, Tracy busca ser popular y admitida por el grupo que ella ha elegido como modelo (dejando a sus antiguas compañeras relegadas a un segundo plano) porque prefiere pertenecer a ese otro grupo para conseguir un mayor reconocimiento social en el contexto del instituto. Remitiéndome a las teorías del desarrollo de la amistad de Sullivan y Selman, parece que la amistad inicialmente se percibe desde una perspectiva predominantemente egocéntrica y con una conciencia etérea del concepto de amigo (como un compañero de juego nada más); posteriormente se adquiere una mayor conciencia de las características personales y de las opiniones de los otros y, finalmente, las amistades se caracterizan por tener un mayor grado de intensidad y por la importancia que se otorga a los conceptos de lealtad, compromiso y apoyo. En este caso Tracy se encontraría en un estado intermedio, valorando las opiniones de los otros, porque le gustaría ser popular como lo es Evie. Posteriormente, cuando va conociendo más a  Evie ve que la lealtad y compromiso que esperaba no es recibido, y que cada vez se ve más atrapada y de peor humor, solo consigue relajarse autolesionándose (haciéndose unos cortes en el brazo) como si el sufrimiento físico le ayudase a liberarse del sufrimiento emocional que discurre en su cabeza. Por otro lado está el papel de la madre, joven y moderna, que al principio tiene una relación muy buena con su hija, la cual se ve deteriorada cuando Tracy se hace amiga íntima de Evie y está pasa más tiempo en su casa, así como cuando aparece su ex novio, al cual Tracy no tiene mucho aprecio. También son contradictorios los sentimientos de Evie, puesto que por un lado es una chica admirada por los demás en el instituto, pero al convivir en casa de Tracy muestra que no es feliz, y busca el cariño y la complicidad de la madre de su amiga, de la cual carece en su casa (convive con su tía, la cual no pasa mucho tiempo con ella), buscando ese apoyo que no tienen y que resulta tan importante en un adolescente (componente de interactividad en el periodo activo de construcción identitaria de Erikson). En el texto sobre la adolescencia y sus contextos antes indicado se señala que estudios recientes han observado que el apoyo percibido de los miembros de la familia se relaciona positivamente con el percibido de los amigos lo que señala la idea de una relación de mutua potenciación entre los contextos familiar y de iguales. Estas relaciones íntimas (o componente de interactividad de Erikson) son percibidas por los jóvenes como relaciones de apoyo y dicho apoyo se relaciona con el ajuste adolescente.
En el transcurso de la película me llama la atención el cartel que aparece cuando Tracy llega por primera vez a Melrose: “BEAUTIFUL IS TRUTH”, que conforme se va desarrollando la película, se ve como el cartel se va deteriorando estando completamente pintado al final de la misma, yo lo he interpretado como que la directora nos envía el mensaje sobre donde está la verdad, la belleza física o en nosotros mismos, porque la protagonista se ve inicialmente deslumbrada por una belleza artificial, sobre el reconocimiento y la popularidad por los demás, pero que luego se encuentra vacío de contenido, cuando comprueba que su mejor amiga se enrolla con su pareja, o le cuenta sus secretos sobre donde esconden las drogas a su madre, y le culpa a ella, aunque todos estas decepciones van a ayudar al adolescente a forjar su personalidad y crear su propia identidad.

RECONSTRUYENDO EL CONCEPTO DE IDENTIDAD

Repasando las definiciones que existen en los blogs de los compañeros y las lecturas de este bloque, parto de la definición de la identidad que dan en el blog “the noise 2010” en el que lo describen como el conjunto de características propias de un individuo que este comienza a asociar con su persona a partir de la adolescencia. Esta definición clara y concisa, puede ser completada si tenemos en cuenta una doble vertiente de la identidad. Por un lado la identidad individual, que sería la aquí definida, pero también existe una identidad grupal o social que se deriva de la pertenencia a un grupo y se ve potenciada por la comparación con otros grupos, de ahí el interés del adolescente en sentirse perteneciente a un grupo en esta etapa en la que Erikson la describe como periodo activo de construcción identitaria. Este autor señala 3 componentes importantes en la formación/desarrollo de la identidad:
1)      La integridad: sentimiento de unidad interior que integra la conducta en un todo coherente.
2)      La continuidad: adquisición de un sentimiento de continuidad temporal enlazando pasado, presente y futuro haciendo que el adolescente tome conciencia de su trayectoria de vida, con un sentido y una dirección.
3)      Interactividad: la relación con las personas más relevantes del entorno que influyen en las decisiones que toma el individuo.
Este periodo de construcción identitaria según Erikson se situaría en la 4ª fase de los Estadios del Desarrollo que él describe, en el que se produce la crisis de identidad (periodo de los 12 a los 18 años): precisamente las edades de los alumnos que tendremos en el futuro, que no solo tendrán que adquirir unas competencias curriculares, sino que también se encontrarán batallando por descubrir su identidad.

sábado, 18 de diciembre de 2010

EN BUSCA DE LA IDENTIDAD: PARTE B

La identidad solemos entenderla como aquello que nos distingue de los demás, por ejemplo, las huellas de identidad, muestran aquellas líneas de nuestros dedos únicas, que sirven para diferenciarnos del resto. Hace poco leí, que en la semana 11 de embarazo, el feto ya tiene formadas sus huellas dáctilares que son distintas de las de cualquier otro ser humano, sin embargo, esta identidad que nos diferencia en los DNIs, no es la que contribuye en la formación de nuestra personalidad. Por lo tanto deberíamos distinguir entre identidad física e identidad psicológica. No sé si la clasificación sería correcta, porque en algunos casos la identidad física también está marcada por aquello con lo que queremos identificarnos, acomodando nuestro "look" a aquella identidad psicológica que sentimos.
Por otro lado, a veces, sobre todo en la adolescencia, o cuando más inseguridades se sufren, no queremos que nuestra identidad sea diferente, sino que buscamos unir nuestra identidad con un grupo, para sentirnos más seguros sobre los derroteros que queremos llevar en nuesra vida, y por esos seguimos unos patrones marcados por ese grupo o tribu, o como queramos llamarlo, buscando sus mismos gustos en música, vestimenta, ocio,...
Es complicado preguntarse por los múltiples aspectos que aborda la palabra identidad, cuando no va a asociado a algo objetivo, como nuestro número de DNI, porque cada uno podemos entenderla de forma diferente.
Voy a mirar las definiciones del resto de los blogs de los compañeros y analizar los textos de este bloque, a ver si consigo aclararme un poco más respecto a este concepto.
Luego os cuento si he tenido éxito o por el contrario me he liado más...

lunes, 15 de noviembre de 2010

PRACTICA 2: PARTE A

-          ¿Qué es ser adolescente hoy?
En el momento actual, y en la cultura occidental la adolescencia es la etapa del desarrollo humano en la que los cambios que sufre la persona se vuelven más evidentes para ella. Yo considero que durante toda la vida se produce una evolución y cambios continuos en el desarrollo del sujeto. Lo que diferencia los cambios sufridos en esta etapa de los cambios de la niñez creo que es la conciencia que de ellos tiene el individuo. Es a partir de esta etapa que el adolescente construye su autoconcepto y se evalúa y valora tanto individualmente como en su relación con los demás.
-          Incertidumbres de los adolescentes en la actual cultura:
El adolescente ha de comenzar a tomar sus propias decisiones. Previa a la adolescencia y a mi desarrollo cognitivo-moral, mis referentes eran mis padres y consideraba que lo que ellos decían o pensaban era lo correcto. En la adolescencia media empiezas a entender, o al menos este fue mi caso y el de muchos de msi amigos, que las ideas y decisiones de los padres nos son infalibles, al relacionarte con otros grupos (o microsistemas como diría Bronfenbrenner en su modelo ecológico del desarrollo humano) ves otras perspectivas más amplias y ya no sirve que te cuenten algo o te aconsejen sobre algo, puesto que necesitas que te lo argumenten, ya que eres capaz de razonar sobre ciertas decisiones. Aunque los padres continúen siendo un apoyo para tu desarrollo suelen perder la consistencia y fuerza que tenían durante la niñez por lo que tus decisiones ya no vienen marcadas solo por lo que ellos te digan (puesto que ya no los ves como infalibles) sino también por tus inquietudes, necesidades e influencias de otros grupos, por lo que se hace más complejo el tener que tomar un camino y a la vez seguir enlazado y conviviendo en el entorno familiar.
En otras culturas en las que existen ritos de iniciación al período adulto (rituales de caza, o con la menarquía) aunque los cambios físicos y psicológicos sean similares, estos ritos que vienen premarcados evitan esa incertidumbre y toma de decisiones, o al menos esas decisiones no conllevan la trascendencia o presiones socio-económicas (como en la tribu de los Somoa) que existen en la cultura occidental, donde la situación de estrés o incertidumbre es mayor.
-          Pérdidas de las que adolece el adolescente actual.
Tal vez las relaciones para el adolescente se hayan dificultado con el estrés del mundo actual. Los trabajos cada vez más absorbentes de los progenitores, hace que el tiempo que pasen con los hijos disminuya y por ello se intente evitar el conflicto en esas pocas horas dedicadas a los hijos, pero también hace que no exista tiempo para conocer que es lo que le ocurre al adolescente. Por otro lado cada vez se dan más casos de hijos únicos, y según la lectura de “La adolescencia y sus contextos: familia, escuela e iguales” de Musitu, G. y otros las relaciones con los hermanos implicarían aspectos positivos, existiendo estudios que indican que la mayoría de los hijos únicos desearían tener hermanos y los que los tienen dicen estar satisfechos y orgullosos de ellos. Los hermanos mayores también siempre han servido como referente, en caso de que no existiese complicidad con los padres, si la diferencia de edad con los hermanos no era muy grande se sustituía esa complicidad por la fraternal.
Otro de las pérdidas de las que puede adolecer el adolescente actual es el tiempo. Cada vez más tienen todas las horas del día programadas (estudios, deportes, actividades elegidas por los padres,…), y a veces no disponen de tiempo para pensar y ser conscientes de lo que realmente quieren hacer, por lo que puede provocarles cierta frustración a la hora de autoconocerse e influir en su autoestima.

domingo, 31 de octubre de 2010

PRACTICA BLOQUE I: PARTE B

¿PUEDE ACELERARSE EL APRENDIZAJE?, Y DE SER ASÍ, ¿ES CONVENIENTE HACERLO?

 El aprendizaje del niño ha de ser progresivo, puesto que hasta que no desarrolle ciertas habilidades básicas no podrá obtener otras capacidades cognitivas mayores. Es obvio que a ciertas edades es muy difícil que un niño adquiera la visión de un mundo global  o de pensamientos abstractos, pero sí desde pequeño puede  recibir estímulos para un desarrollo más temprano. Existen cantidades enormes de juguetes educativos, destinados para ciertos tipos de edades que fomentan el conocimiento del niño:

El niño va adquiriendo ciertas capacidades conforme va creciendo pero para ello necesita ciertos estímulos que le ayuden a adquirirlas, el estimularle sin forzarle o presionarle para aprender supone una forma de conseguir una mayor capacidad de su cerebro sin provocarle la ansiedad o pérdida de autoestima de la que nos habla David Eikind.
La intención no es crear superniños, pero sí estimular su aprendizaje. Todos hemos escuchado que si desde pequeños aprendemos más de un idioma nos costará menos que cuando seamos adultos, puesto que se aprendería de forma natural:
“En 1997, el equipo de neurólogos del hospital Memorial Sloan Kettering, de Nueva York, comprobó que el cerebro de un niño es capaz de memorizar dos lenguajes en forma simultánea en una misma región de la corteza cerebral, utilizando un único grupo de neuronas, a diferencia de los adultos, quienes al adquirir un segundo idioma lo almacenan en un área distinta. En términos prácticos, esto significa que mientras más pequeños sean los niños, el aprendizaje de idiomas es natural y simple, ya que no hacen el proceso de traducir el pensamiento de un idioma a otro, como los adultos. Recientes estudios han comprobado que los bebés que escuchan discursos en lengua extranjera durante sus primeros meses de vida hallan más fácil aprender idiomas en el colegio o una vez son adultos. Psicólogos de la Universidad de Bristol indicaron que el cerebro en desarrollo pasa por un periodo de "programación" en la infancia que establece para la vida del individuo su capacidad para reconocer sonidos clave en cualquiera que se convierta en su lengua nativa. Así, cuando un bebé nace, tiene la capacidad de distinguir cada tipo de discurso. Incluso si los padres son ingleses, el niño tiene la capacidad de distinguir sonidos vocales griegos y chinos. Un recién nacido es capaz de distinguir todos los sonidos, pero cerca de los seis meses selecciona sólo aquellos que son relevantes para su lenguaje”.
“Como en cualquier aprendizaje, a lo largo del proceso se pueden producir una serie de alteraciones en el lenguaje, similares en monolingües y bilingües, ya que los niños monolingües de 18 meses tienen un vocabulario de unas 50 palabras, igual que los plurilingües, pero repartidas entre sus distintos idiomas. Es posible que no puedan expresarse tan bien en un idioma si se los compara con otros niños de su edad”.
Haciendo una síntesis de todo lo que hemos visto en este bloque sobre el desarrollo humano y el aprendizaje, tras evaluar las diferentes teorías considero que no hay que forzar el aprendizaje, pero sí estimularlo.